Esta noche tardé mucho en dormir, le daba vueltas a lo ocurrido, la vulgar situación de alguien con mucho arrojo.....y la inseguridad que crea en ciertas personas,en fin, la misma historia se repite constantemente a lo largo de mi vida. Me pregunto si es exagerado, si los demás son conscientes de la situación tan complicada que sufro siempre que esto ocurre, pero mucho me temo que no es así.
¿De que pueden acusarme cuando yo no formo parte de ese juego tirano?.
¿A que puedo agarrarme?
Me encierro en mi isla e intento no caer en la mediocridad,me superan esas luchas de gallos, sacando el plumaje para ver cual de ellos es mas macho y se lleva el trofeo,es denigrante.
Y continuaba reflexionando yo sin poder dormir...acaso el hecho de llevar una vida ejemplar, de pareja bien avenida no es prueba suficiente
Pienso lo inquietante que sería correr riesgos nuevos, nuevas aventuras....pero son solo eso...pensamientos.
Soy de las que piensa que el matrimonio me importa un pimiento, lo importante es el amor...por eso quiero hacer compatibles las dos cosas, pero nadie garantiza, y el matrimonio menos aún, que perdure.Hay que hacerlo descansar, revitalizarlo, para que perdure.
El amor no es nada, es un estado de ánimo, puede acabarse mientras duermes sin ser consciente de ello.
Hay dos tipos de seductores: el que le gusta seducir como necesidad de afirmación y el Donjuan, este
último es el que después hace relatos sobre sus conquistas y se vanagloria de ello....disfruta mas contándolo que consumando el hecho.
Hay que tener cuidado, mucho cuidado, con estos seductores de medio pelo,en ocasiones te crean problemas gratuitos sin apenas haber mediado dos palabras con ellos.
Pero también confesaré que es agradable y te hace sentir especial, te transporta a una nube alta...muy alta, saber que eres deseada, lo difícil viene después, cuando tienes que poner los pies en la tierra y dejar la vanidad a un lado.
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